El Ayuntamiento de Hornachuelos ha celebrado un pleno extraordinario repleto de cuestiones relacionadas con los impuestos y las ordenanzas municipales.
Por una parte, se han tenido que poner en marcha ordenanzas municipales diversas ya que se han creado nuevos servicios que requieren de las mismas. Por otro lado, se han modificado algunas ordenanzas con el fin de ofrecer una serie de bonificaciones a los vecinos.
En lo que a las bonificaciones se refiere, el Ayuntamiento de Hornachuelos ha aprobado la bonificación de un impuesto que se establece en la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía que viene a regular el uso de suelo no urbanizable para otro uso, que deberá ser compensado por quien lo disfrute. Este impuesto puede alcanzar el 10% de la inversión a realizar y se bonifica en un 90% por parte del ayuntamiento melojo con la intención de favorecer la implantación en el municipio de actividades que generen empleo, a grandes rasgos se bonifica un 90% cuando la actuación genere más de 5 puestos de trabajo.
Esta acción, forma parte de la estrategia marcada por parte del equipo de gobierno para promover e incentivar el tejido empresarial de la localidad y que van de la mano de un paquete de medidas que poco a poco están viendo la luz.
Otra de las bonificaciones que aprueba el pleno de la corporación tiene que ver con la ordenanza fiscal reguladora del IBI, se añaden modificaciones para quienes instalen en sus hogares sistemas de aprovechamiento térmico de la energía solar, concretamente el 50% de la cuota integra del IBI con el limite del coste de la instalación.
Quizás, la bonificación más importante que pone en marcha el Ayuntamiento de Hornachuelos tiene que ver con la plusvalía. Con esta bonificación Hornachuelos se convierte en uno de los municipios pioneros en la bonificación del impuesto de plusvalía.
Según el responsable de Hacienda en el consistorio Alejandro Tamarit, es una bonificación con marcado carácter social ya que viene a corregir una situación considerada injusta por parte del equipo de gobierno, pues se gravan con impuestos las transmisiones de bienes inmuebles.
Se bonifica en este caso la transmisión de la vivienda habitual y permanente por causa de muerte del titular en beneficio de cónyuge o hijos. La bonificación se establece en el 95% de la cuota del impuesto, con lo que se evita esta tributación, creando una situación más justa.
