Al hilo de los últimos hechos acontecidos en los que la Asociación Nacional de Protección Animal Galgos del Sur ha participado, junto al Seprona de la Guardia Civil, en el decomiso de veinticinco perros de caza en pésimas condiciones en unas instalaciones ubicadas en el término municipal de Hornachuelos, el ayuntamiento de la localidad ha querido referirse al asunto, principalmente para desvincular al verdadero sector de las rehalas de los hechos tan deleznables como estos. Precisamente, la Federación Andaluza de Caza (FAC) ha detallado que los animales se encontraban en una instalación que carece de documentación y no cumple ninguno de los requisitos legales para ser considerada una rehala. En este punto ha coincidido la delegada de Medio Ambiente en el ayuntamiento meloja, Mª Rosa Fernández quien ha explicado el punto de vista municipal del asunto y como se han desarrollaron los hechos.
El Seprona informó al ayuntamiento de la localidad y se la delegada municipal se personó en el lugar donde se pudo comprobar el estado lamentable en el que estaban los animales. La delgada ha confirmado que 3 de estos perros están en instalaciones municipales, 12 en manos de una protectora y el resto que tenían microchip han sido devueltos a sus dueños. En la visita al lugar de los hechos se pudo observar un perro fallecido incluso huesos. Afortunadamente, los perros recatados se encuentran en buenas condiciones y recuperándose de la situación.
El Ayuntamiento ha querido denunciar públicamente los hechos y esperan que caiga todo el peso de la ley sobre esta persona, subrayando que no es un verdadero rehalero y que su comportamiento sólo sirve para ensuciar el nombre del sector. La delegada ha explicado que está persona, que no es vecino de la localidad, no tenía la documentación pertinente y que por tanto no puede considerarse rehala.
En este sentido, el Ayuntamiento han querido defender la labor del sector rehaleros y desvincular hechos como los acaecidos con la realidad de un sector que en Hornachuelos supone un importante motor económico y en el que se trabaja con total profesionalidad y respeto al animal.
Precisamente en pro de favorecer al sector y sobre todo de ofrecer las condiciones necesarias para los animales, el ayuntamiento puso en marcha su zona ganadera, siendo pioneros en este tipo de instalaciones.
El centro ganadero es una apuesta importante de la localidad por la mejora de este sector habilitando una zona ganadera adecuada en cuanto a ubicación y espacios y regulando la utilización, mantenimiento y funcionamiento de las instalaciones.
El municipio de Hornachuelos siempre ha estado muy vinculado con el mundo de la ganadería y sector cinegético. De hecho, son pilares básicos en su economía y los profesionales relacionados con el sector no contaban con un espacio adecuado.
El Centro Ganadero Municipal de Hornachuelos, consiste en un conjunto de edificaciones e instalaciones necesarias que permiten el alojamiento de 9 rehalas, una explotación semiextensiva de ganado caprino y ocho explotaciones de pequeña capacidad de ganado equino. Con la explotación de dicha actuación, se obtiene el control y alojamiento de las numerosas rehalas existentes en el municipio derivadas de la importante actividad cinegética que se desarrolla en el extenso término municipal de Hornachuelos. Además se cuenta con espacios comunes y todas las instalaciones necesarias y que exige la normativa.
Hornachuelos es uno de los primero municipios de la provincia e incluso de Andalucía en contar con una zona ganadera. Un hito importante y que viene a resolver un problema histórico ya que no existía una zona ganadera como tal, y esta actividad se realizaba en las afueras del pueblo sin reunir las condiciones necesarias.
El ayuntamiento ha querido agradecer la labor de la Guardia Civil en el desarrollo de los hechos.
Decomiso de 25 perros
La Asociación Nacional de Protección Animal Galgos del Sur participaba el pasado 27 de abril, junto al Seprona de la Guardia Civil, en el decomiso de 25 perros de caza de unas instalaciones en pésimas condiciones ubicada en el término municipal de Hornachuelos.
La inspección del Seprona en las instalaciones de esta persona, investigado ahora por un delito de maltrato animal, fue realizada el viernes 26 de abril y arrojó indicios suficientes para proceder al decomiso de todos los animales encontrados en el lugar al día siguiente.
25 perros de caza estaban vivos y uno muerto, aún atado a su cadena. En el lugar del rescate malvivían en condiciones lamentables y de insalubridad, todos ellos caquéxicos, desnutridos, parasitados, con heridas, atados con cadenas y viviendo entre sus heces.