El objetivo es “promocionar nuevos modelos de turismo activo en los parques naturales vinculado a sus propios recursos”, ha destacado el delegado de Desarrollo Sostenible durante la ruta interpretada y la suelta de aves de este fin de semana en Hornachuelos
El avistamiento de aves no es solo una actividad para especialistas, sino para todos los públicos: familias, mayores y pequeños. Con este objetivo, vienen trabajando desde hace más de un año la delegación territorial de Desarrollo Sostenible en colaboración con el Grupo de Desarrollo Rural de Sierra Morena y para ello, organizan rutas de este nuevo turismo denominado “orniturismo”, en este caso, el parque natural de la Sierra de Hornachuelos.
El delegado territorial, Giuseppe Aloisio, ha indicado que el objetivo con estas actividades es “promocionar nuevos modelos de turismo activo en los parques naturales vinculado a sus propios recursos, y tienen la novedad de estar dirigida a todos los públicos, en especial a familias con niños”.
La propuesta de este tipo de turismo es de pequeños grupos y recorridos para hacer paradas de avistamiento y escucha, como la ruta realizada el pasado fin de semana por los senderos “Botánico” y “Rabilarga” del Parque Natural de Hornachuelos, donde los participantes se han detenido en determinados tramos para la observación y la escucha de cantos.
En estas rutas no se pretende ver sólo a los grandes rapaces o especies amenazadas difíciles de observar, como la cigüeña o buitre negros, sino a las aves más cercanas, más fáciles de avistar, como las diferentes especies de paseriformes o pequeños insectívoros. La observación de aves se ha convertido así en un interesante producto turístico, una de las prácticas de ocio más sencilla y menos costosa que podemos encontrar, sólo nos hace falta calzado cómodo, vestimenta adecuada (evitando colores llamativos), unos prismáticos y una buena guía ilustrada.
Asimismo, a lo largo de la visita de este fin de semana, los monitores han explicado los diferentes hábitats por los que han transitado (matorral mediterráneo, bosques de ribera, etc.), y las diferencias para la presencia de uno u otro tipo de especies de aves.
Además de la riqueza ornitológica del territorio, los visitantes pueden apoyarse en los equipamientos públicos existentes para el aficionado (observatorios, centros de visitantes, miradores…) y pedir información en este caso en el centro de visitantes del parque natural de Hornachuelos.
Durante la actividad, los asistentes han participado en la liberación en el Área Recreativa “Huerta del Rey” de ejemplares recuperados en el Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) de “Los Villares” de Córdoba. En concreto, los animales liberados han sido rapaces diurnas como un Busardo ratonero (Buteo buteo) y nocturnas, un búho real (Bubo bubo) y un búho chico (Asio otus). Asimismo, y como novedad, dentro de la categoría de mamíferos, se ha procedido a la liberación de un lirón careto (Eliomys quercinus), roedor esencialmente arborícola y de hábitos nocturnos propio de hábitats mediterráneos.
Durante la suelta de especies, Giuseppe Aloisio ha recordado el papel fundamental que tienen los ciudadanos en la recuperación de especies en estos centros. “El mayor número de avisos para la recogida de animales que precisan atención o tratamiento provienen de ciudadanos que se encuentran con éstos, bien por colisiones, atropello o caídas de nido, y se toman la molestia de avisar al número de emergencia 112 para contactará con los Agentes de Medio Ambiente. Gracias a ellos se recuperan y hoy podemos liberarlos al medio”.
Red Centros de Recuperación de Especies Amenazadas
La Red de Centros de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) dependientes de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, presentes en todas las provincias andaluzas, tiene como objetivo principal la recuperación de los ejemplares de fauna terrestre amenazada o protegida.
Esta red de centros, funcionan según un procedimiento que garantiza un servicio eficaz y coordinado de atención de los avisos recibidos, desde primeros auxilios, traslado y recepción de los ejemplares, diagnóstico y tratamientos adecuados según los casos, hasta su eventual liberación una vez recuperados.
Dentro de los vertebrados terrestres, son las aves el grupo que tiene mayor número de ingresos en los CREAS. Esto es así debido a sus hábitos diurnos, su movilidad y su abundancia, que los convierte en el grupo más vulnerable a las interferencias humanas y en el más fácilmente detectable cuando los animales resultan por algún motivo incapacitados. Tras este grupo mayoritario, se encuentran reptiles y mamíferos y un porcentaje mucho menor de anfibios.
La Red de CREA no podría funcionar sin la desinteresada colaboración de la ciudadanía en general, razón por la que la Consejería se esfuerza por dar a conocer este servicio que presta. La mayor aportación procede de particulares, seguido de la Guardia Civil, Agentes de Medio Ambiente, otras Administraciones Públicas y la Policía Municipal, entre otros.
